¿Cómo puede el FBI enviar un mensaje a los estafadores para que lo piensen dos veces?
De Dhina Clement, Comunicaciones –
Michael Henschel, un hombre de 70 años, fue declarado culpable de apropiarse de propiedades de personas mayores y de quienes no hablan inglés. Se presentaba como un tipo carismático que intentaba ayudar a esas personas a vender sus casas, pero en realidad presentaba escrituras falsas ilegales sobre las propiedades de sus víctimas, las robaba y les cobraba tasas ilegales para limpiar sus títulos. Estafó a muchas personas de la zona de Los Ángeles que ya tenían problemas económicos y cobró más de 7 millones de dólares de esas propiedades utilizando alias, empresas ficticias y numerosas cuentas para ocultar los delitos. Como sus víctimas eran ancianas o no hablaban inglés, el efecto fue desastroso para ellas, dejando a muchas sin hogar e incapaces de recuperarse de la situación. En mayo, Henschel fue declarado culpable de fraude postal y en septiembre fue condenado a 20 años de prisión. En cuanto a los que perdieron su dinero y sus propiedades, el FBI sigue intentando ayudarles a recuperar su dinero.
¿Cómo puede el FBI enviar un mensaje a estos estafadores para que se lo piensen dos veces antes de cometer estas atrocidades? ¿Cómo pueden ayudar a proteger a esas víctimas vulnerables? El FBI puede incorporar la nueva tecnología EyeDetect® a su sistema. EyeDetect, que se lanzó en 2014, se utiliza hoy en día en 34 países por parte de los gobiernos, las fuerzas del orden, los departamentos penitenciarios, los investigadores, los abogados, los terapeutas y las empresas privadas. La prueba es similar a la del polígrafo, con ambas pruebas cercanas al 90% de precisión, pero es rápida, más barata y menos invasiva que está. La persona que se somete a un examen EyeDetect se sienta en un escritorio y responde a preguntas de verdadero o falso en una tableta. Una cámara de infrarrojos rastrea el movimiento de los ojos, el parpadeo y la dilatación de las pupilas para determinar si el sujeto miente. Tras 30 minutos, un algoritmo puntúa su capacidad de engaño en una escala de cero a cien. Así, los delincuentes sabrán que habrá métodos para confirmar su participación en los delitos.
Fuente
Foto por /Alexas Fotos